Sant Lluís vivió ayer una tarde mágica previa a las fiestas del municipio. La localidad vistió a los gigantes para las fastos, disfrutó de una jornada de juegos infantiles y degustó una gran paella. Los más pequeños participaron de un día festivo lleno de luz, color y alegría. Una paella gigante, patrocinada por el Ajuntament de Sant Lluís y que contó con la colaboración del cocinero Alejandro Martín, coronó la velada, que fue a beneficio de la asociación Aspanob que lucha contra el cáncer. |