Por “la necesidad de consolidar, promocionar y aumentar la llegada de cruceros al puerto de Maó”, la portavoz del PP en el ayuntamiento de Maó, Águeda Reynés, ha solicitado al Ayuntamiento de Maó el “desarrollo de una Ley de Cruceros en Baleares que atienda las diferencias y necesidades específicas de cada isla“.
“Para evitar que la presión de plataformas ciudadanas que se han manifestado en Palma en contra del turismo de cruceros y a favor de establecer limitaciones a la llegada de grandes buques acabe en la promulgación de una
Ley que generalice las restricciones en todo el territorio balear”, el PP quiere que se tengan en cuenta las particularidades de cada isla “y desigual grado de desarrollo e implantación de este segmento de mercado”.
Los populares señalan que “los puertos menorquines están por detrás en el número de escalas que se producen en cada temporada turística en Mallorca y en Eivissa y hay por tanto techo de crecimiento para un filón del mercado turístico que constituye una incuestionable fuente de riqueza y desarrollo económico, dinamizador del comercio, que crea puestos de trabajo y que contribuye a diversificar la oferta y a ampliar la temporada turística”.
Águeda Reynés propone trabajar conjuntamente con el Consell, el Govern, Autoridad Portuaria y el sector privado para garantizar las mejores soluciones ambientales, económicas y sociales presentes y futuras del puerto de Maó como destino de cruceros. Y lo hace “bajo premisa de requerir a las navieras que adopten medidas de
descarbonización de los buques” y la implantación de infraestructuras para garantizar la recogida de
aguas residuales de los cruceros y evitar los vertidos al mar.
El Grupo Popular quiere que el Govern elabore un estudio técnico específico y pormenorizado sobre los efectos positivos y negativos de la llegada de cruceros en cada uno de los puertos de Baleares para que desde el rigor la futura Ley se adapte a las circunstancias de cada isla con eficacia”.
