Los caprichosos números son claros y dicen que el Hestia Menorca 2019/2020 es la cara opuesta al mismo equipo de la temporada pasada. El equipo menorquín presenta un balance de 5 victorias y 2 derrotas y es tercero en la clasificación, justo cuando se está a punto de superar el primer tercio de la 1ª Fase de la LEB Plata.
Dicen que las comparaciones son odiosas pero es inevitable echar la vista atrás, viajando en el tiempo a la séptima jornada de la temporada 2018/2019. El Bàsquet Menorca acababa de llevarse una valiosa victoria de la pista del CB Almansa, 56-64. Era la segunda triunfo de la temporada, que daba aire a un equipo que se encontraba en el pozo de la clasificación.
La de Almansa fue la primera de las cuatro victorias en cinco partidos del equipo de Oriol Pagès, logrando así asear su clasificación en el tramo final de la primera vuelta.
Pero volvamos a la séptima jornada de la temporada pasada. El balance, tras ganar en Almansa era de 2-5, ocupando la tercera posición por la parte baja de la clasificación. El destino ha querido que en el presente, la dinámica se haya invertido y el Bàsquet Menorca presente una trayectoria totalmente opuesta a la de hace justo un año.
Siguiendo con las comparaciones de los, aveces, fríos números, el Hestia Menorca 2018/2019 presentaba un promedio 66 puntos anotados, frente a los 76’7 puntos que anota en la presente temporada. En defensa encajaba 70’2 puntos y en ésta encaja 67’8. Podemos observar que el equipo de Pagès ya se caracterizaba por hacer un buen trabajo defensivo, pero se veía claramente penalizado por los problemas ofensivos, que no le permitían cerrar los partidos.
El Menorca 2018/2019 dependía en exceso de la aportación ofensiva de Richaud Pack, de largo el máximo anotador del equipo. Al exterior se le sumaba la aportación de Andreu Matalí y Jan Orfila, los amos de la pintura menorquina, y momentos más esporádicos de otros jugadores, como Pitu Jiménez, que fue de menos a más, Xavi Hernández, especialmente en el primer tramo de la temporada, y Okeke y Miso , que reforzaron al equipo en el tramo final de la competición.
El Hestia Menorca del presente es un equipo más compacto, con más fondo de armario y con más opciones de sumar. Otegui, Jiménez, Hernández, Covington, Guebert, Corbacho, Méndez, Bute…son más los jugadores que aportan y a diferencia de la pasada temporada, el mal día de alguno de los puntales del equipo se ve suplido por la aportación de cualquier otro jugador.
Son números que invitan al optimismo, recordemos que queda mucha liga por delante, pero está claro que el Hestia Menorca del presente es un equipo que ilusiona a la afición. La pregunta es…¿Hasta donde será capaz de llegar el equipo dirigido por Pagès?. El paso de las jornadas nos dará la respuesta, mientras, disfrutemos del dulce presente que nos brinda el equipo de todos los menorquines.
(Texto: Xus Rotger)