Ha sido una semana extraña, por lo de tener que lidiar con las sensaciones de la derrota, tras seis jornada consecutivas acostumbrado a saborear las mieles del triunfo. En este casi desconocido contexto, el Hestia Menorca prepara otro duro compromiso, ante un nuevo hueso, duro de roer, el CB Prat, donde juega el ex-jugador del Menorca Bàsquet, Marc Blanch.
Será una nueva prueba de fuego en éste particular tour en el que se encuentra enfrascado el equipo menorquín, que empezó contra el Barça y aún le restan dos jornadas más para superar el tramo más exigente del calendario, Prat esta semana y Girona en el arranque de la segunda vuelta.
Hasta ahora, el balance de este sector del calendario es positivo para los intereses menorquines, dos victorias en tres partidos, una victoria más en estas dos jornadas mantendría estas buenas sensaciones. Si son dos las victorias que caen del lado menorquín, la nota será de sobresaliente y se estará en condiciones de asaltar la cima de la clasificación.
Los de Oriol Pagès intentarán traerse una victoria de prestigio, que haga olvidar el mal trago sufrido en Maó ante el Real Murcia. Para ello deberá mostrar su mejor versión, dada la entidad del rival. Se antoja trascendental, más si cabe que en otras ocasiones, el buen trabajo defensivo, para bajar exponencialmente las virtudes ofensivas del rival. Un interesante duelo del mejor ataque contra la segunda mejor defensa del grupo.
El CB Prat es, sin duda, uno de los mejores equipos de la categoría, con amplia experiencia en la LEB Oro, de la que descendió la temporada pasada. Viene de cosechar dos victorias de postín en pistas tan difíciles como Murcia, 76-77, y Girona, líder de la clasificación, 64-68. 7 victorias y 3 derrotas le sitúan en la cuarta plaza, igualado con Murcia, segundo, y Menorca, tercero.
Su potencial ofensivo es evidente, convirtiéndose en el mejor ataque de toda la categoría, con 83’5 puntos por partido. El Prat destaca por tener varios jugadores que son capaces de anotar, tanto desde el interior como desde el 6’75.
El equipo que entrena Daniel Miret García atesora en sus filas de una mezcla de juventud y veteranía que se conjugan a la perfección para convertirse en un equipo temible. Ejemplo de ello Arnau Parrado, 19 años, y Marc Blanch, 37 años. Ellos son el máximo exponente del juego catalán.
Marc Blanch presenta unos números envidiables, siendo un seguro en anotación, 14’2 puntos por cita y aportando hasta 16’1 créditos por encuentro. Pero es que el joven Arnau Parrado supera la tarjeta de presentación de Blanch, con 14’9 puntos y 6’1 rebotes por partido, se ha convertido en el MVP del equipo, 16’9 créditos de valoración media. El badalonés, ex-jugador del Clavijo, tiene una buena mano desde el tiro exterior, superando el 52% de acierto desde el triple y el 54% en el tiro de dos puntos.
Pero hay otros jugadores a los que la defensa del Bàsquet Menorca deberá estar muy atenta. Uno de ellos es Carlos Marzo, un consumado asistente y repartidor de juego, rozando las 6 asistencias por partido. En la pintura poseen la calidad de jugadores como Vinicius Da Silva, que es, junto a el croata Leo Cizmic y Andreu Parrado, el dueño del rebote catalán. Precisamente Cizmic, además de rebotear bien, es una de las mayores amenazas desde el triple, rozando el 50% de acierto y siendo el que más intentos ha encestado.
Estas son algunas de las credenciales que han llevado el CB Prat a vencer a equipos como el Murcia y Girona y estar luchando en la zona alta de la clasificación.
El partido se jugará esta sábado, a partir de las 20 horas, en el Pavelló Joan Busquets, en el que se espera una nutrida presencia de seguidores menorquines afincados en tierras catalanas. Los árbitros del partido serán Eva Areste y Alejandro Benavente.