Cuando en 1993 Menorca se convirtió en Reserva de la Biosfera, ya se hablaba de crecimiento sostenible. La interpretación de qué era eso de crecer de manera sostenible no era igual según quien opinara. Si nos atenemos a la definición del término, se podría decir que sostenible implica que el desarrollo en el tiempo de una actividad no acaba con los recursos naturales que le permitan seguir en adelante, incluso de cara a futuras generaciones.
Si lo extrapolamos al turismo, vendría a ser que tal como se desarrolla la actividad turística, se mantienen los recursos naturales que la hacen posible.
Ahora vamos a meter por en medio los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) y ya tenemos, no solo argumentos, si no también una pauta de buenas prácticas avalada por las Naciones Unidas (ONU).
No es fácil encontrar hoy un destino turístico que vaya en contra de este marco de responsabilidad social y corporativa que se han puesto a aplicar todas las empresas del sector. Así tenemos que todos los destinos, y eso se está viendo estos días en la feria FITUR, son más “sostenibles” que nunca.
La revista Aire Libre ha publicado un número especial que llega antes de la feria con una retaíla de destinos que se alinean con esta filosofía. De momento les ha valido una distinción por parte de los propios organizadores del evento turístico en España por excelencia. Menorca no aparece entre los destinos que destaca la publicación especializada (sí alguna otra población balear). Y es que a la hora de subirse al carro de una tendencia, no hay ningún destino que sea lento para reaccionar. Al menos si quiere seguir llamando la atención del gran público.
Precisamente este “gran público” se da cita este fin de semana en la feria, que deja atrás las jornadas profesionales para convertirse en una fiesta para los que buscan ideas para sus próximas vacaciones. Menorca puede ser Reserva de la biosfera y sostenible, pero tiene a disposición de los curiosos que se acercan al mostrador tanta cantidad de dípticos, publicaciones o panfletos como el menos sostenible.
La gran mayoría de estos papeles llenaran los cubos de basura antes de salir del recinto. Pero a la mayoría nos encanta cargarnos de postales de una playa idílica o llevarnos un catálogo de los mejores restaurantes y hoteles de la zona a la que nos gustaría ir de vacaciones.
El turismo sostenible se está convirtiendo en una prioridad cada vez mayor para todos los destinos. Los nuevos modelos deben basarse en la responsabilidad con las presentes y futuras generaciones y en un consenso en las actuaciones.
Asturias cuenta con siete espacios declarados Reserva de la Biosfera; también algunos lugares de Galicia, Cataluña, Cantabria y Cataluña, además de Menorca, que aparecen entre los cien destinos más sostenibles del mundo. En el plano internacional, Costa Rica –que atesora el 3,5% de la vida marina y el 5% de la flora y fauna del planeta en tan solo el 0,03% de la superficie mundial- ya preserva un 25% de su territorio.
