El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha acudido este Jueves Santo al que es ya el tercer Pleno que celebra el Congreso desde que se decretase el estado de alarma. Poco más de 40 diputados dispersos en sus asientos y apenas unos pocos trabajadores de la institución han seguido presencialmente la intervención de Sánchez, destinada a conseguir el apoyo suficiente para que las medidas excepcionales del decreto del estado de alarma puedan prorrogarse durante otros quince días, hasta el 26 de abril.
El jefe del Ejecutivo ha apelado a la unidad de todas las formaciones políticas en esta crisis sanitaria y ha reconocido que la normalidad no será plena hasta que se encuentre una vacuna para el Covid-19.
En este contexto, durante su intervención den el Pleno del Congreso destinado a aprobar la prórroga del decreto de estado de alarma durante otros quince días, hasta el 26 de abril, Sánchez ha pedido a los partidos unidad y que desplieguen su influencia con otras formaciones políticas afines en la Unión Europea para seguir adoptando las medidas necesarias y superar la crisis económica que se ha generado.
El jefe del Ejecutivo ha expuesto las actuaciones llevadas a cabo por su gabinete hasta el momento y ha anunciado que el Gobierno está preparando un plan para ir desmantelando progresivamente las medidas de confinamiento que se están aplicando. De hecho, según Sánchez, un equipo multidisciplinar está diseñando la reactivación progresiva.
En este sentido, el presidente ha explicado que los científicos que asesoran al Ejecutivo han establecido varios marcadores que fijarán el ritmo de retorno en función de la dinámica de los contagios. Por ello, ha señalado que “cada avance semanal hará posible la apertura de espacios“, y ha añadido que cada paso adelante vendrá acompañado de una “nueva normalidad”.
Pese a ello, ha dejado claro que ésta “solo será plena cuando el mundo disponga de vacuna eficaz”. Precisamente por esta razón, Sánchez ha advertido de que todos los pasos han de ser “escalonados y muy cautelosos”.