La presidenta del Govern, Francina Armengol, ha lanzado este viernes un mensaje a los ciudadanos de las Illes Balears para que sigan actuando con prudencia y extremen las medidas de seguridad e higiene a partir de este sábado, cuando, con el Plan para la transición hacia una nueva normalidad aprobado por el Gobierno de España, se permitirán las salidas a la calle de la población, en distintas franjas horarias.
En este mensaje, Armengol ha recordado y agradecido que hemos llegado a este primer paso porque estamos haciendo como sociedad un “sacrificio enorme” y “durísimo”, al tiempo que “hemos visto como enfermaban familiares y amigos, como el virus se llevaba a aquellos a quienes más amamos “.
Por eso ha valorado que lo que permite que se puedan tomar medidas para aliviar el confinamiento es precisamente “el esfuerzo de cada uno de nosotros”, que “está contribuyendo a hacer retroceder la enfermedad”. “Sé que, entre todos y todas, estamos haciendo lo que toca. Estamos haciendo que el esfuerzo valga la pena “, ha insistido.
La presidenta ha apelado a este esfuerzo colectivo hecho hasta ahora para que a partir de mañana, cuando mucha gente podrá volver salir de su casa, “un hecho positivo, un hecho que demuestra que, como sociedad, lo estamos haciendo bien , no pueda convertirse en una mala noticia “. Y ha añadido: “no debemos perder de vista que aún no hemos desterrado la enfermedad, que aún nos queda mucho por hacer”.
Precisamente por ello, Armengol ha hecho un llamamiento a extremar las precauciones en las salidas a la calle a partir de mañana, y hacer caso de las recomendaciones y cumplir con las medidas de seguridad e higiene: que nos lavemos las manos, que nos pongamos la mascarilla y que respetemos las medidas de distanciamiento social, guardando la distancia de los 2 metros, o los 5 si hacemos deporte.
La presidenta ha pedido también que se cumplan los horarios establecidos y advirtió que las salidas deben seguir siendo excepcionales y mantenerse una protección especial hacia las personas mayores y con patologías crónicas, los colectivos más vulnerables a los virus, evitando todavía los contactos. “Y lo mismo tendremos que hacer cuando se permitan recuperar los encuentros familiares”, señaló.
“Todos queremos abrazar a nuestros abuelos”, ha comprendido, “pero no debemos perder de vista que son un colectivo de riesgo y que abrazarlos ahora es ponerlos en peligro”. “Desafortunadamente esto no se ha acabado”, añadió, recordando que “los virus continúa contagiando, continúa matando, sobre todo a los más vulnerables: las personas mayores y los enfermos crónicos. Sólo si vemos el peligro podremos superarlo “.
