La NASA ha aportado su granito de arena ante la situación que vive el mundo debido al coronavirus y ha utilizado el laboratorio de propulsión de cohetes en California para desarrollar un nuevo ventilador de alta presión que podrán utilizar los pacientes de coronavirus. Lo sorprendente es que han conseguido diseñar el prototipo de una manera funcional y probada en 37 días.
Las pruebas se han realizado en la Escuela de medicina Icahn del Monte Sinaí de Nueva York y los resultados han sido muy satisfactorios. Estos respiraderos se empezarán a usar en pacientes con deficiencias respiratorias. El nombre que se le ha proporcionado a la creación es VITAL, representativo de las siglas Ventilator Intervention Technology Accesible locally.
Lo que han pretendido los ingenieros ha sido reforzar los aspectos en los que han flojeado los fabricantes actuales: el tiempo de fabricación y la cantidad de componentes utilizados. Por eso la NASA ha optado por un diseño de máquina que cumple en los dos aspectos: necesita una menor cantidad de piezas y es mucho más rápido de fabricar.
.-Es un artículo de Empresayeconomia.republica.com – AMIC para Menorcaaldia.com