El primer día de verano tras el solsticio está resultando toda una declaración de principios meteorológicamente hablando. Ha llegado el calor. Tras una serie de jornadas de viento y nubes, este domingo ha sido radiante, soleado y con temperaturas lo suficientemente altas para que muchos residentes optaran por ir a las playas. Hasta media tarde la máxima se registraba en Maó con 30 grados. Pero en el resto de estaciones meteorológicas de la Isla ninguna máxima bajaba de los 26 grados. Esta situación invitó a muchos isleños a disfrutar de las playas por todo el litoral. Son Bou, la más larga de la isla estaba medio llena, pero también había un número interesante de bañistas en Santo Tomás y Binigaus, por citar otros puntos de la costa. Para esta semana entrante se espera una temperatura similar a la de hoy y no se prevén lluvias por lo que la posibilidad de encontrar playas con una buena ocupación es alta. |