¿Sabes dónde está tu cámara de fotos? Para las generaciones más jóvenes quizás ya no hay una respuesta porque la fotografía se ha integrado a su smartphone como si fuera una sola cosa. A pesar de los avances tecnológicos, todavía existen limitaciones a tener en cuenta a la hora de disparar fotos con nuestros móviles como la ausencia de zoom óptico o el rendimiento con poca luz, aunque la tecnología avanza que es una barbaridad.
Lo primero que debes saber antes de lanzarte a hacer fotos con tu teléfono es conocer las características de la óptica. Lo más habitual es pensar que a cuantos más píxeles, mayor resolución. Eso es cierto pero hay otras características muy importantes que hay que conocer. La capacidad de mantener la imagen estable o la velocidad de obturación. La apertura de la lente afectará a sacar mejores fotos con menos luz. Por eso hay teléfonos que sacan mejores fotos de la luna que otros.
Otra cosa que ocurre muy a menudo es que le damos toda nuestra confianza a la opción de Automático. Hay todo un mundo de posibilidades en las opciones del teléfono para ajustar luminosidad, velocidad, enfoque,… Al conocerlas (trasteando un poco con ellas, por ejemplo) te darás cuenta de que puedes hacer mucho más con la cámara del móvil de lo que te imaginas.
Hay un manual básico de fotografía que todo el mundo debería conocer si quiere hacer buenas fotos; saber identificar de donde viene la luz y en qué cantidad es fundamental para conseguir un efecto o no. El contraluz, a menos que lo busques para un efecto artístico, no es lo mejor para sacar a tus amigos en la red social si solo se les ve la silueta.
Ya te hemos comentado que hay dispositivos que vienen con un estabilizador que ayuda a que tu foto salga bien aunque vayas al ritmo de las olas del mar. Pero sobre todo cuando quieras hacer una foto con poca luz, intenta conseguir siempre un punto de apoyo que evite el más mínimo movimiento del móvil. Un trípode de resultará de gran ayuda. Los resultados saltarán a la vista.
Siempre vigila que el objetivo está limpio y que no está rayado. Sin eso no hay foto que valga.
Otro error que cometemos es el de hacer fotos muy similares. Si analizamos todas las fotos que hacemos con el móvil, seguro que la gran mayoría las disparamos estando de pie con el móvil a la altura de los ojos. Pero si siempre disparamos las fotos desde el mismo punto de vista será difícil conseguir resultados diferentes. Prueba a agacharte a la altura del suelo.
Para fotos espectaculares, los macros; cuando nos acercamos mucho para captar todo el detalle de, por ejemplo, una flor. Aquí suele ser muy útil utilizar recursos como desenfocar el fondo. Así le damos más protagonismo al objeto principal.
Es ideal saber centrar la imagen. Que en la foto salga lo que quieres que salga sin medios-objetos o medios paisajes.
No uses el zoom digital. El óptico sí da buenos resultados. Pero si no lo tienes es mejor no usar el zoom y editar a posteriori la foto para acercar o destacar el objeto que quieras de tu instantánea.
Coloca el móvil en lugares y posiciones diferentes. La creatividad está en mano de los valientes que prueban, prueban y siguen probando. Y como el teléfono puede hacer las fotos solas (programa el disparo), solo la imaginación será el límite para las fotos más sorprendentes.