Durante este fin de semana se han realizado 8 inspecciones policiales en Menorca de la que se han levantado 8 actas de sanción a establecimientos de Es Castell y Alaior por incumplimientos relacionados con excesos de capacidad, con distancias sociales, incumplimiento de horarios y uso de mascarillas entre el personal de establecimientos de restauración, y por prescindir de información al público y señalización adecuada.
En el marco de las actuaciones de inspección coordinadas conjuntamente desde la Dirección General de Emergencias e Interior para intervenir en situaciones que puedan poner en riesgo la salud ciudadana ante la COVID-19, los equipos formados por inspectores de la Comunidad y de los consejos insulares y por agentes de los diferentes cuerpos y fuerzas de seguridad (cuerpo nacional de Policía , Guardia Civil y policías locales) han realizado inspecciones este fin de semana en 91 locales, zonas de ocio nocturno y espacios públicos de Baleares.
De estas intervenciones, 37 se han producido en Mallorca (en el Passeig Marítim de Palma, en S’Arenal, Bunyola, Andratx y Alcúdia); 8 en Menorca, (en Es Castell y Alaior); 39 en Ibiza (Sant Antoni de Portmany, Santa Eulàlia des Riu, Sant Josep de sa Talaia y Santa Gertrudis), y 7 en Formentera (Illetes, playa de Migjorn, Es Pujols y Sant Ferran).
Como resultado de estas inspecciones, los equipos multidisciplinarios han levantado 44 actas por incumplimientos de las normas sanitarias: 31 en Mallorca, 8 en Menorca y 5 en Formentera.
Desde el inicio de la campaña de inspecciones coordinadas se han producido un total de 204 intervenciones en todas las islas y se han levantado 114 actas de infracción, que pasarán a ser instruidas por las diferentes administraciones implicadas en las actuaciones.
El Decreto Ley de régimen sancionador para los incumplimientos de las normas relativas a la COVID-19, en vigor desde este pasado viernes 10 de julio, enmarcará los expedientes iniciados en estas actuaciones. Las sanciones pueden llegar a los 600.000 euros cuando se produzcan infracciones muy graves.
pues las autoridades tendrían que visitar Calzedonia, la tienda llena, probadores a tope y sin desinfectar cada vez que alguien entra en ellos a probarse ropa, y la ropa igualmente sin desinfectar.