Se trata de dos instalaciones eléctricas autónomas a partir de las cuales se recoge energía limpia para diferentes usos por parte de los trabajadores del servicio de socorristas de Maó, y que sirve, también, para guardar elementos que se utilizan para atender a pacientes.
Con el objetivo de incrementar la potencia eléctrica de las casetas de los socorristas de Sa Mesquida y Es Grau, el ayuntamiento de Maó ha ampliado la superficie de sus placas solares fotovoltaicas.
Con esta actuación el consistorio demuestra su apuesta por la implantación progresiva de instalaciones que funcionan con energías limpias, a fin de seguir avanzando hacia un modelo de ciudad más sostenible y más amable con el medio ambiente.