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Casi 1.000 fieles se oponen al veto del Obispado sobre Carme Mascaró como catequista

Una carta del Grup de Revisió de Vida de Ferreries recoge 970 apoyos en apenas cuatro días

Cuestionados.
Cuestionados.
Los fieles de Menorca cuestionan abiertamente la decisión tomada por la Diócesis de Menorca en torno al veto de Carme Mascaró.

La polémica en torno al veto del Obispado de Menorca sobre Carme Mascaró para que no pueda ejercer de catequista vive un nuevo episodio. El Grup de Revisió de Vida de Ferreries redactó una carta de apoyo a Mascaró a quien se le negó la posibilidad de seguir impartiendo doctrina a los menores debido a su boda civil con otra mujer.

Esta misiva se publicó en internet y en apenas cuatro días logró sumar 970 apoyos en total. Entre ellos se encuentran desde una carmelita descalza hasta trabajadores de Cáritas Diocesana, fieles integrados en varios grupos laicos, catedráticos y profesores universitarios, entre otros. Pese a que la gran mayoría de firmantes son menorquines también aparecen algunas personas procedentes de Mallorca, Catalunya, Valencia y La Rioja, entre otras comunidades autónomas.

Se trata de un nuevo grupo de fieles de base que se opone a la decisión de la Diócesis después de que todo el grupo de catequistas de Sant Miquel en Ciutadella, en donde ejercía Mascaró, se solidarizasen con ella.

En la carta, que se puede leer completa en nuestra sección de Opinión, se señala que el objetivo de la misiva es abrir un espacio de diálogo en torno a este tema y no forzar un cambio de actitud con el número de firmas.

En el texto los firmantes señalan que “queremos manifestar nuestra profunda tristeza e indignación por un gesto que consideramos que va en contra del Evangelio y de todo lo que Jesús predicó. ¿Con qué justificación el Obispado de Menorca, sin previa consulta a las comunidades parroquiales, decide prescindir de una catequista que lo único que ha hecho ha estado manifestar públicamente una relación de amor? ¿En qué han cambiado fe y el compromiso de Carme antes y después de la boda? ¿Quizás la Iglesia estaba dispuesta a abrirle las puertas para poderse casar dentro de ella? ¿Cuál es el criterio para que una persona pueda ser catequista? ¿No es la coherencia? Si fuéramos exigentes, ningún catequista, seglar, monja o cura, serían encontrados nunca suficientemente coherentes. ¿Así, Carme tiene menos coherencia por haberse unido civilmente con una mujer?”

Critican a la Diócesis que “algunos de los miembros del tribunal eclesiástico la han juzgado basándose sólo en este hecho: se ha casado por amor de la única manera que le era permitida. En unas comunidades como las menorquinas donde todos nos conocemos, poner una etiqueta a una persona puede suponer un estigma para toda la vida. Ahora, se mire como se mire, esta destitución no suena a Evangelio, sino a todo el contrario: exclusión, intolerancia y discriminación.”

La carta avanza señalando que “nuestra esperanza es que esta carta pueda servir para cambiar la manera de considerar las personas LGTBI por parte de la Iglesia. Quisiéramos una Iglesia inclusiva, acogedora, sin prejuicios, abierta y respetuosa con sus diferencias, que siguiera su línea que marca el Papa Francisco en este tema”.

Recuerdan además que la palabra Iglesia, etimológicamente significa Asamblea, y por ello lamentan que “se tomen decisiones importantes desde el tribunal eclesial sin hablar con los implicados, sin un proceso de discernimiento. Y, en consecuencia, se prioricen las formas externas por encima del fondo de las personas. Es justamente lo contrario de lo que haría Jesús.”

La carta termina afirmando que “en un tiempo de cambios sociales vertiginosos como los actuales, deseamos una Iglesia más centrada en el amor evangélico y menos en el Derecho canónico. No somos niños pequeños, al que solo ellos (¡Y alerta, ninguna mujer!), pueden guiar. Si no escuchamos los signos del tiempo, la iglesia estará cada vez más vacía. Tenemos la confianza de que el Obispo escuchará y creará el espacio de diálogo necesario. Por todos estos motivos  pedimos que se abra un tiempo de discernimiento que pueda llevar a replantear públicamente la decisión tomada antes de finales de año.”

El Obispado de Menorca veta a una catequista que se ha casado con una mujer

El Obispado rechaza mantener a la catequista por ‘coherencia’


Comments (5)

    1. Me pregunto dónde está puesta la fidelidad de estos 970 “fieles”, porque a la Tradición Apostólica, a la Santa Doctrina de la Iglesia y a su Pastor, parece que no. Desde mi convicción de que en Menorca somos muchos más los que nos alegramos de la fidelidad de Mons. Conesa a lo que ha prometido salvaguardar y defender, elevo mis oraciones a Dios Padre para que tenga misericordia por nuestros muchos pecados y para que aliente y sostenga a este Obispo fiel en su Pontificado. Que el Señor le bendiga siempre.

  1. Si hay una estancia que deba brillar por inclusividad y calor humanos en el gran hotel de la misoginia es la Comunidad Eclesial orientada por su sano instinto de que “Dios es mayor que nuestra consciencia pues lo conoce todo”.(1Juan 3,20).Así Jesús en casuística personal e íntima escribía con el dedo en arena…

  2. … yo también quiero que Carme se reincorpore a su puesto de trabajo en su empresa multinacional extranjera vaticana, pese a que eso será una victoria para la iglesia católica, porque al final todo seguirá igual, ella se verá obligada a darles a sus catequistas las mismas directrices machistas y misóginas de su temario doctrinal, unos dogmas caducos que perturban cualquier mente pensante del siglo veintiuno… en fin, espero que al menos le paguen por su esfuerzo, porque conociendo a la secta, no me extrañaría que encima de hacerle bulling, la explotaran laboralmente, como hacen siempre…

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