Es de extraterrestres la situación que estamos viviendo. Una aventura tan inquietante que, como Indiana Jones con su arca, buscamos la normalidad perdida, deseando el ímpetu de la juventud para enfrentar esta cruzada, superar el coronavirus maldito, alcanzando el reino de la vacuna ideal. Está siendo tan extenuante que querríamos ser Peter Pan, incluso si eso implicase reencontrarse con el Capitán Garfio de nuestra infancia. Aunque mantengamos el espíritu de un niño, nos ponemos la capa de super hombres y súper mujeres, dispuestos a librar nuestra particular guerra de la pandemia, que no de las galaxias. Esta historia se disfruta mucho más si la BSO la interpreta la Banda de Música de Maó. Con las salas de cine cerradas, el Teatro Principal de Maó se ha convertido esta tarde de sábado en un sustituto de película. Treinta músicos– el máximo permitido por las medidas de seguridad sanitaria-, dirigidos por un entregado Miquel Llario (dirigir con máscarilla, un sobreesfuerzo a valorar) han conseguido transportar al público que agotaba el aforo permitido a un mundo de fantasía y emoción a través de la música de John Willians. El compositor estadounidense, Premio Princesa de Asturias de las Artes 2020 junto con Ennio Morricone, ha firmado algunas de las bandas sonoras más destacadas de la historia del cine y la Banda de Música de Maó ha ofrecido una selección de las mismas. E.T., Indiana Jones, Hook, Superman y Starwars han integrado un programa vibrante, ejecutado con maestría por la formación, con los solistas a un alto nivel. Por poner un pero, quizás, un momento, en el segundo movimiento de Starwars, ha parecido que se perdía un poco la concentración, de manera insignificante por lo breve. Han prevalecido entrega y emoción, nostalgia, alegría, intriga, inocencia, picardía…sentimientos encontrados modulados por la música, que han confluido en un bis, sobresaliente en energía, en un concierto que de por sí ha sido especialmente enérgico, y que nos ha vuelto a hacer soñar con el séptimo arte acomodados en el teatro de ópera más antiguo de España, una suerte de paradoja de lo más estimulante. |