El coronavirus (Covid-19) ha llegado para variar muchos hábitos de nuestra sociedad. En el ámbito del transporte, la bicicleta ha subido como uno de los medios de transporte más adecuados para lidiar con la nueva situación. Y esto se debe a que la bicicleta puede contribuir a combatir el coronavirus. Por un lado, porque con ella seguimos avanzando por la senda de la movilidad sostenible, mejorando la calidad de aire que habíamos experimentado últimamente con la disminución de la circulación de coches y por otro, porque contribuye a mantener la distancia de seguridad y a realizar el ejercicio físico que estos días no hemos podido practicar debido al teletrabajo o en la restricción de actividades deportivas o de ocio.
Se ha podido leer y escuchar en las últimas semanas, la denominada «fiebre por la bicicleta» durante la desescalada. Quienes lo han constatado sobre todo han sido los fabricantes de bicicletas y los talleres mecánicos. Buenas cifras están obteniendo también los servicios de bici compartida o bicisharing. El restablecimiento del servicio parece acelerarse atrayendo nuevos usuarios.
Por eso ahora más que nunca hay que potenciar las labores de concienciación sobre el uso correcto de la bicicleta, las precauciones que se deben tomar para circular con seguridad por ciudad o redoblar la apuesta por la convivencia entre ciclistas, peatones y conductores .
.- Este es un artículo de circulaseguro.com y AMIC para Menorcaaldia
