Entre enero de 2012 y marzo de 2013 un hombre que se presentaba como gestor de inversiones realizó diversos contratos ficticios de préstamos personales a más de 20 personas en Ciutadella y se quedaba con el dinero que le entregaban.
Este lunes, en juicio telemático celebrado en la Audiencia Provincial de Baleares, el acusado ha reconocido los hechos y ha aceptado una condena de tres años y medio de prisión y una multa a pagar cuatro euros diarios durante nueve meses y un día.
Al haberse declarado culpable de un delito continuado de estafa se le ha rebajado la pena ya que la Fiscalía le pedía nueve años de prisión.