El grupo ecologista GOB se plantea un futuro a corto plazo en el que hay que actuar ante un “PTI preocupante”, buscando una economía ecosocial en la Isla y tratando de ser más efectivos debido a la pandemia. Así se anunció en la asamblea de socios de la entidad celebrada este lunes.
La cita sirvió para aprobar un presupuesto para el año próximo de 543.000 euros, renovar a parte de una junta directiva insular que sigue presidida por Carles Coll y apoyar a Bosco Febrer como presidente interinsular.
En la memoria anual se explicó que el número de socios del GOB ha crecido hasta los 1.419, las fincas que han entrado en el proyecto de Custòdia Agrària ya son 32, se han tratado a 1.143 animales en el centre de Recuperació de la Fauna y hasta 1.600 personas se han inscrito en el programa de cuidado de un tramo del litoral puesto en marcha este año.