El plan de desescalada anunciado por Boris Johnson durante las últimas horas podría significar el atisbo de cierta luz al final del túnel para economías en las que las operaciones con el Reino Unido son esenciales. Tal es el caso de Menorca en donde los principales agentes turísticos implicados están analizando el proyecto británico para poder adecuar una respuesta que permita volver a operar cuanto antes dentro de la denominada nueva normalidad.
Pero en una dinámica bidireccional, como es el caso del sector turístico, no sólo se deben tener en cuenta los pasos que se están tomando fuera de nuestras fronteras sino que además se deben contemplar si los lugares de destino están preparados logísticamente para una posible reactivación.
Así lo ha apuntado la gerente de la patronal hotelera ASHOME, Azucena Jiménez, para quien es vital aprovechar las oportunidades que vayan surgiendo en una comunidad en donde el sector turístico representa la parte más importante del PIB y en la que, a raíz de la mala temporada pasada debido a la pandemia, dicho PIB sufrió una caída del 25%. Para Jiménez, otra caída del PIB durante esta próxima campaña significaría un duro golpe del cual resultaría casi imposible que la sociedad isleña se recuperase.
Frente a este escenario de incertidumbre, las estrategias que deben adoptarse para salvar los números este año, se centran, a su juicio, en dos frentes.
El primero y más importante es la campaña de vacunación. Actualmente se calcula que en Baleares se ha vacunado a un 2% de la población. Todos los agentes implicados se vieron ilusionados por la intención expresada por el Gobierno central de tener en mayo al 70% de la población inmunizada. Pero debido al desarrollo de los acontecimientos y a los problemas de suministro de vacunas esta opción es más que cuestionable.
La Administración ha afirmado que se llevará a cabo una vacunación masiva en cuanto lleguen las dosis. También se ha asegurado en distintos medios que toda la logística necesaria para ello ya está lista, aunque como manifiestan desde el sector empresarial todavía no se han hecho públicas las acciones y medidas que se van a tomar para alcanzar unos niveles de vacunación que hagan de las isla un destino seguro.
En ASHOME consideran indispensable para la sociedad que la Administración tenga transparencia a la hora de exponer como se va a llevar a cabo la logística de la vacunación masiva para que, en el hipotético caso de que queden puntos sin cubrir, los demás agentes implicados, como son los empresarios, puedan ofrecer su infraestructura y sus medios para abordar la situación de una manera conjunta con cierto éxito.
En este sentido, desde ASHOME se ha solicitado una reunión con la Administración para abordar una estrategia conjunta dentro de unos plazos que permitan actuar conforme a los avances que se logren más allá de nuestras fronteras. Se espera que durante los próximos días tenga lugar dicho encuentro de vital importancia para la economía menorquina.
El otro frente de acción estaría supeditado al éxito o fracaso de la campaña de vacunación dentro de unos plazos realmente efectivos para que la isla sea considerada destino seguro.
Si no se llegasen a cumplir los plazos de vacunación se debería abordar la estrategia de los corredores seguros. Este sería el último de los escenarios ya que no se contempla un panorama todavía peor en el que la actividad turística y económica no pueda ser retomada, ya que eso significaría la hecatombe social en una economía eminentemente turística como la nuestra.
Los denominados corredores seguros implican una serie de problemas que limitarían el acceso a según qué mercados, ya que para establecer dichos corredores es necesario que tanto el lugar de origen como de destino tengan unas cifras epidemiológicas similares.
Tras este análisis de la situación recobra especial trascendencia el enfocar una campaña de vacunación masiva con la implicación de todos los sectores sociales para encarar con perspectivas de éxito la próxima temporada turística, y para que esto suceda es esencial la previa transparencia de las administraciones en los planes de acción. Un asunto tan importante debe ser considerado de interés público.
Otro factor que añade algo de incertidumbre a esta temporada turística es el Brexit. Tal como se afirma desde ASHOME se tiene constancia de que el Aeropuerto ya está preparado para hacer frente a los cambios en los procedimientos de llegada de ciudadanos británicos y pese a que se tiene asumido que se van a producir esperas y colas en los aeropuertos, en principio no se contempla el Brexit como una problema en la llegada de turistas británicos a no ser que se produzca un cambio en las políticas británicas en cuanto a la movilidad.
