Que los tiempos han cambiado y que ya son pocos los románticos que envían cartas no es ninguna novedad. Sin embargo las cartas y paquetes postales siguen existiendo y es preciso que se repartan y lleguen a su destino, tal como marca la ley. En Menorca no se está cumpliendo en muchos casos porque faltan medios, sobre todo humanos.
El proceso de privatización en el que lleva inmerso Correos ha ido forzando a cambios que ahora denuncian los propios trabajadores a través de desayunos informativos que, de manera itinerante, están haciendo en diversos centros de trabajo de las islas (en Menorca los pasados días 19 y 20).
Luisa Costa, portavoz de estas acciones, denunciaba lo que considera el desguace de la mayor compañía pública del país. En la defensa del carácter público de Correos ponen en la picota las políticas de la actual dirección por estar, según dice, preparando la futura privatización.
Los signos inequívocos para Costa son el trasvase de actividad a la filial Correos Express, la externalización de servicios, la desamortización inmobiliaria de antiguos centros de trabajo, la reducción de la red postal que ha perdido la acción de servicio en zonas rurales, la reducción de contratación y supresión de puestos de trabajo que obliga a las plantillas a no encontrar sustitutos de bajas y afectando al servicio hasta el punto de que hay ocasiones en las que no se pueden llevar las cartas en tiempo y forma. Según Costa ha aumentado un 36% la temporalidad de los puestos de trabajo, un 25% el empleo a tiempo parcial y un 75% en la red de oficinas.
Los trabajadores muestran su preocupación por lo que entienden como una mala política para conducir la empresa, hasta el punto que temen la quiebra económica. Esto no debería llegar a producirse porque, como apuntan desde los sindicatos, la dinámica de trabajo del servicio postal sí está funcionando bien en otros países europeos que han reforzado su carácter público.
Los sindicatos apuntan que en esta primera fase de movilizaciones están dando a conocer su postura pero que si no hay algún movimiento por parte de la dirección de Correos se plantean ir a la huelga.