El Govern balear quiere cerrar la central térmica de Maó y la Unión Europea ya ha anunciado que hay que rebajar las emisiones de gases contaminantes de la planta menorquina o sancionará a partir de agosto a las instituciones isleñas. El problema es que parece que no hay todavía un plan definido para rebajar esta contaminación aunque otros térmicas de Baleares sí lo tienen. Así lo ha expuesto la diputada autonómica de Més per Menorca, Patrícia Font en el Pleno del Parlament.
Allí ha recordado que si hay un plan y una hoja de ruta para reducir las emisiones de la planta térmica de Alcúdia, pero no para la de Maó. La econacionalista ha denunciado también que la central menorquina usa preferentemente las turbinas de fuel oil que son mucho más contaminantes que las de gas. También ha echado en cara la demora en el tendido del segundo cable eléctrico con Mallorca que debe reducir el uso de la planta del puerto maonés.
El conseller de Transición Energètica, Juan Pedro Yllanes, reconocía que la meta es cerrar esta central pero no ha explicado cómo, ni fechas concretas para rebajar las emisiones de gases.
Yllanes lo fía todo a las energías renovables y a decisiones de futuro que dependen de otras instituciones como la puesta en funcionamiento de un segundo cable eléctrico. En este snetido respondió que se ha hablado con Madrid y que seguirán presionando en esta cuestión.