Las islas se preparan para la posible llegada de tortugas marinas a nuestras costas para nidificar, como ha pasado los dos últimos años. El proyecto llamado ‘Anida’ tiene por objetivo dar a conocer este fenómeno para que la gente pueda identificar y preparar a los técnicos para responder de manera adecuada.
Desde la Conselleria de Medi Ambient y la Fundación Palma Aquarium se publicarán campañas para reconocer el rastro que dejan las tortugas después de desovar, así como informar de la forma correcta de actuar en estos casos. Lo más importante es tener claro que, en caso de encontrar una tortuga marina, hay que llamar al 112 de manera inmediata y no molestar al animal. Los técnicos recuerdan la prohibición de tocarla, hacerle fotos con flash, deslumbrar, hacerla movimientos bruscos o ruidos, evitando en todo momento que nos vea y se atraquen los perros, ya que se puede asustar y volver a la mar sin realizar la puesta de huevos.
Si encontramos un rastro en la arena, debemos evitar pisarlo. En caso de encontrar crías, se pide llamar primero al 112 y, si es posible, evitar que las tortugas lleguen al mar, recogiéndolas y manteniéndolas húmedas en sombra.
La tortuga común es la más abundante en el litoral mediterráneo. Aunque se alimenta alrededor del archipiélago balear, generalmente no cría en nuestro litoral. Sin embargo, en los últimos años se han producido diferentes episodios de nidificación, seguramente causados por el aumento de la temperatura global. Se prevé que de cada vez las nidificación de tortuga marina sean más frecuentes en las costas baleares. El año pasado se detectó la llegada de una en la playa de Punta Prima.