Nadia Ghulam nació en Kabul, Afganistán. Es una escritora y refugiada afgana en España. Durante diez años se hizo pasar por su difunto hermano para evadir las rígidas prohibiciones del régimen talibán contra las mujeres. Años más tarde, narró esta experiencia por medio de la novela El secreto de mi turbante, que escribió junto con Agnès Rotger y que le valió el Premio Prudenci Bertrana 2010.
La organización de Alergomenorca le cursó una invitación para clausurar su acto de 2020, que no se celebró. Finalmente podrá acudir este 2 de octubre para hacer una conferencia magistral. La doctora Ana Elices explicaba estos días en Radio Menorca que la invitación a la escritora se hizo mucho antes de que Estados Unidos decidiera abandonar el país, con la consecuente ocupación talibán de la capital. Ahora, Alergomenorca tiene a una invitada cuyas palabras revisten aún más interés por motivo de la actualidad internacional.
Tiempo atrás, en 1991 y durante la guerra civil afgana, resultó malherida cuando la casa de la familia Ghulam fue destruida por una bomba. Salió del hospital, seis meses y catorce operaciones después, con cicatrices en el rostro, que la marcaron para el resto de su vida. En aquellos momentos los talibanes habían conseguido el control del país y, a raíz de la guerra, su familia lo había perdido todo. Su hermano había muerto y el padre se encontraba en un estado precario de salud y ni ella ni sus hermanas o la madre podían trabajar por el hecho de ser mujeres. En este momento, a la edad de once años, decidió cambiar de identidad y hacerse pasar por su hermano Zelmai para poder trabajar y alimentar a su familia.
El libro El secreto de mi turbante explica la vida de la propia Nadia en aquellos años. El 2006, gracias la Asociación para los Derechos Humanos en Afganistán (ASDHA), llegó a Barcelona, ciudad en que vive actualmente con sus padres adoptivos. Se encuentra implicada en diferentes iniciativas para ayudar su país, además de aprender catalán, informática, integración social y materias que tienen que ver con la calidad del trabajo de las ONG.
Además de El secreto de mi turbante, ha escrito Cuentos que me curaron (2014), con Joan Soler, y La primera estrella del anochecer (2016).