El síndicato UGT, en lo que respecta a su área de Servicios Públicos, denuncia que el servicio de enfermería de la residencia municipal de Maó vive una situación “insostenible” por el hecho de que la falta de personal les ha obligado a realizar horas extras ilegales y a renunciar a descansos y vacaciones, lo que provoca que la plantilla esté “agotada” física y psicológicamente, y que no pueda conciliar su vida personal y laboral.
La organización sindical ha explicado que desde hace más de un año no se cumple la ratio de personal de enfermería marcada por la Conselleria de Salut y se cubren los turnos “a costa de los esfuerzos y los derechos” de las trabajadoras y trabajadores del centro.
La cobertura de manera “irregular” de las bajas por enfermedad o de maternidad y paternidad ha llevado a que en algunas semanas de noviembre se hayan quedado solo tres profesionales de enfermería para cubrir todos los turnos de mañana, tarde y noche.
La rotación de trabajo de lunes a viernes ha pasado a ser de una persona por turno, cuando lo mínimo es que al menos dos cubran la mañana.
Esta “infradotación de personal” ha supuesto que el personal haya doblado turnos, no haya descansado en 12 ó 13 días y haya sobrepasado su jornada entre 30 y 90 minutos cada día.
Este panorama ya se vivió con el brote de Covid detectado en la residencia en noviembre del año pasado, cuando para responder a las indicaciones de la Conselleria de que hubiera al menos dos personas en el turno de mañana y tarde, hasta cinco enfermeros sumaron entre 70 y 80 horas extras a las realizadas ese año.
El pronóstico para este diciembre no mejora, ya que con las bajas previstas solo habrá cuatro efectivos de enfermería en activo para cubrir todos los turnos.
Al igual que ha sucedido en otros momentos, se ha comunicado según informa el sindicato, aunque no por escrito, a los trabajadores de la residencia municipal de Maó la suspensión de las vacaciones concedidas, algunos días se arrastran desde 2020.
La dirección de la residencia ha sugerido pagar las vacaciones de este año que faltan por disfrutar, como ya sucediera el año pasado. Sin embargo, algunas enfermeras prefieren descansar porque “lo necesitan”.
UGT-Servicios Públicos exige al Ajuntament de Maó que solucione de manera “urgente” los déficits de personal que arrastra la residencia municipal y que deje de “parchear” la situación. Y ha comunicado que denunciará la situación ante Inspección de Trabajo.
“Se necesita un plan de vacaciones y de cobertura de bajas. No se pueden seguir exigiendo esfuerzos como si estuviéramos al inicio de la pandemia”, ha reclamado el sindicato, que ha alertado de que puede ocurrir una “desgracia” por un error humano causado por el cansancio y el estrés laboral.
