He escuchado a políticos españoles contrarios a la independencia de Catalunya argumentando que no tiene sentido crear más fronteras cuando hay que trabajar para que vayan desapareciendo. En cambio, todavía estoy esperando que alguno de esos políticos se muestre partidario de que Ucrania se integre en Rusia para comenzar a trabajar en la desaparición de las fronteras.
Comparto esta inquietud en privado y uno de mis buenos amigos me contesta que la diferencia consiste en que Ucrania quiere que le devuelvan Crimea y que no le roben dos regiones más. Entonces le digo que yo quiero que los aliados llamen al dictador Franco y le digan que, o se pega un tiro él mismo como hizo Hitler, por lo mucho que colaboró con los nazis, o se lo pegan ellos.
“Te damos 24 horas de plazo” es lo que me gustaría que le hubieran dicho en 1945.
Si aquellos vencedores hubieran actuado correctamente ante un pueblo español que había sido masacrado por los militares que apoyaron el golpe de Estado del 18 de julio con la ayuda criminal de los perdedores de la Segunda Guerra Mundial, es muy poco probable que ayer mismo, 28 de enero de 2021, un tal Belloch hubiera declarado que Catalunya es mucho más peligrosa para las instituciones que el terrorismo de ETA.
Conviene que el señor ex ministro del PSOE cuide bien sus argumentos, pues podemos pensar que la política cambiante le importa más que la vida irrecuperable de las víctimas inocentes. Cuento esto del también ex juez porque es una de esas noticias que solo he visto en la prensa de Catalunya.