Si en el inicio de curso el Pinta B-CB Es Castell no acababa dar con la tecla para sacar adelante los partidos, ahora, con apenas un mes del año nuevo, el equipo de Gino Rovellada está mostrando que su progresión es evidente, dos victorias y una sola derrota le permiten ganar en tranquilidad y, porque no, empezar a mirar hacia cotas algo más altas en la clasificación, pese a que el partido se iniciaba con una mala noticia para los intereses amarillos, la baja de última hora de Bulfoni.

La visita del Sant Cugat a la Zona Esportiva Sergi Llull, un equipo de su liga, era una buena oportunidad para confirmar el buen momento de forma del equipo, y así lo ha hecho, con un triunfo ante su afición, 67-56, cimentado en el primer cuarto, 16-7, desde una buena defensa y aprovechando la omnipresencia de Jan Orfila, que acabó el partido con dobles figuras, 16 puntos y 11 rebotes, además de la inestimable ayuda de hombres como Biel Torres, 12 puntos y 8 rebotes, o Sergi Llufriu, autor de tres triples, acabando el partido con 12 puntos.

El primer acto ha marcó el desarrollo del resto del encuentro, desde un excelente trabajo defensivo el equipo obtenía sus primeras ventajas, para cerrarlo con un esperanzador 16-7. En el segundo cuarto el Sant Cugat empezó a encontrar opciones ofensivas que le permitían anotar con más facilidad, ello les permitía amenazar con acercarse en el electrónico y en varias ocasiones bajaron la distancia hasta los 5 puntos, precisamente la que presidía el marcador al descanso.

Tras el paso por los vestuarios el Pinta B volvió a ajustar el trabajo en campo propio, justo tras el amenazador 35-33 inicial, un 10-2 volvía a poner tierra de por medio, 45-35, ventaja que conservó y aumentó a 11 al entrar en el tramo definitivo del partido. No hubo lugar al sufrimiento, cualquier intento catalán por reducir distancias se topaba con un muro menorquín que supo gestionar a la perfección el botín obtenido, para acabar llevándose un triunfo vital para ganar en tranquilidad.

Estadística Oficial del Partido