Desde el 2007 se celebra en todo el mundo La Hora del Planeta, una iniciativa que nació en Sidney como un gesto simbólico para llamar la atención sobre el problema del cambio climático. Un sencillo gesto que consiste en apagar las luces de nuestras casas o edificios y que involucra a muchas administraciones (en Menorca la mayoría de ayuntamientos participan) así como monumentos y todo durante una hora, de 20 a 21 horas.
Además, llega en el calendario justo en el fin de semana en el que se hace el cambio de hora estacional. El sábado a las 3 de la mañana tendremos que pasar los relojes a las 2.
La asociación ecologista WWF creó esta Hora del planeta como un símbolo con el que recordar que la naturaleza es el sistema de soporte vital del planeta, que nos brinda todo lo que necesitamos, desde el aire que respiramos hasta el agua que bebemos y los alimentos que comemos y que debemos defenderla ahora para salvaguardar la salud de nuestro planeta y, a su vez, nuestra propia salud y bienestar.
Desde sus inicios la campaña se ha convertido en uno de los movimientos ambientales más grandes del mundo, ofreciendo un altavoz a millones de personas y a miles de empresas e instituciones que se suman en más de 200 países.
Según explican desde WWF, este año, la Hora del Planeta tendrá lugar en un momento muy difícil debido al conflicto en Ucrania y la crisis humanitaria que está provocando.
La Hora del Planeta se creó precisamente para unir al mundo y apoyar a las personas y el planeta. La edición 2022 tiene lugar en un momento especialmente importante. Una alianza de gobiernos y organizaciones, entre ellas WWF, piden una mayor ambición y una acción urgente para detener y revertir la pérdida de la naturaleza para 2030. De hecho, estamos en plena década de la restauración de Naciones Unidas y en 2030 también debemos cumplir con los Objetivos de Desarrollo Sostenible marcados por la Agenda 2030.
Mirando el calendario, unas semanas después de la Hora del Planeta 2022, los líderes mundiales se reunirán en la COP15 del Convenio de Naciones Unidas sobre Diversidad Biológica para decidir sobre un nuevo plan de acción global para la naturaleza para la próxima década.
Además, apenas estamos saliendo de los efectos de una pandemia global. Por eso en 2022 cobrará aún más relevancia el concepto One Health pues después de la pandemia es cada vez es más evidente que solo podemos vivir como seres humanos sanos en un planeta que también lo está.
Con la escalada del precio de la electricidad parece que no va a ser difícil participar. Ya no solo se trata de un concepto de solidaridad con el medioambiente y la sostenibilidad, es que el precio de la luz está en máximos históricos como recordó esta misma semana el Director General de Consumo de Baleares Félix Alonso. Se está pagando hasta siete veces más que el año anterior y eso incrementa de manera exponencial la pobreza energética de muchos hogares. Nos obliga a aprender a vivir sin enchufarnos a la red eléctrica.
Por otro lado, WWF añade una nueva propuesta complementaria a la de la Hora del Planeta y propone el reto “Dar la vuelta al Planeta” sumando los 40.000 KM que suponen su perímetro. A este reto lo han bautizado como #KMPorElPlaneta