El Govern balear apuesta “por las políticas de prevención de las adicciones, de protección de nuestros menores y colectivos más vulnerables, de paz social y convivencia vecinal” y el conseller de Transición Energética, Memoria Democrática y Sectores Productivos, Juan Pedro Yllanes, ha anunciado este miércoles una propuesta de modificación de la Ley del Juego que incluye, entre otras cosas, la moratoria automática de nuevas licencias hasta que el número actual de salas de juego y apuestas no se reduzca a la mitad, y que acaba de superar el periodo de alegaciones.
Con estas medidas, el Govern se asegura de que no se concederán más licencias de juego en las Islas en las próximas décadas. Las Illes Balears se convierten así en la primera comunidad autónoma de todo el Estado en impedir, de facto, la apertura de nuevas salas de juego y de nuevas casas de apuestas.
“En esta legislatura hemos conseguido el punto de inflexión que todas y todos esperábamos en materia de densidad de salas de juego por habitante en nuestras Islas”, ha dicho Yllanes. “No podíamos continuar doblando la media española de salas por habitante”.
La propuesta de modificación de la Ley de Juego 8/2014 anunciada fijará un máximo de 75 salas de juego por cada millón de habitantes, existen 140 en la actualidad, tres casinos y cuatro bingos, e incluye, entre otras medidas, la moratoria automática de nuevas licencias hasta que se alcance esta cifra y, por tanto, el número de salas no se reduzca hasta la mitad.