Los especialistas de la Guardia civil han incautado a un vecino de Maó dos armas inutilizadas, dos detonadoras; las cuatro sin regularizar. Munición de los calibres 40, 32, 9mm, 38sp, 222rem y 22LR; 900 pistones y 500 proyectiles de punta hueca, cargadores de gran capacidad, dos llaves de pugilato, además de una defensa eléctrica, un tiragomas perfeccionado y un spray de defensa, estos últimos considerados como armas prohibidas.
Tras una inspección realizada por la Intervención de Armas y Explosivos de la Guardia civil en Menorca, los agentes comprobaron que en un domicilio, el propietario poseía varias armas prohibidas, numerosa munición de diferentes
calibres y materia reglamentada, incumpliendo varios preceptos, tanto del Reglamento de Armas como del reglamento de Cartuchería, por lo que los guardias civiles lo han propuesto para una sanción por una infracción a la Ley Orgánica de Seguridad Ciudadana.