Las obras de recuperación y rehabilitación del Real Alcázar de Ciutadella avanzan según el ritmo previsto, y estarán terminadas a finales de este año o principios de 2023. Están financiadas con fondos del Impuesto de Turismo Sostenible.
La primera fase de la actuación, consistente en la supresión de elementos que no formaban parte del edificio original, se considera prácticamente terminada. A la vez que se eliminaban estas partes, se han construido los tres contrafuertes que sujetan el edificio original y lo refuerzan. Esta intervención ha supuesto un reto arquitectónico importante, por la naturaleza de los cimientos y por la complicación de tener que levantar los contrafuertes a la vez que se eliminaban los elementos disonantes con la estructura original. Se ha realizado una cimentación con micropivotaje, y los contrafuertes están construidos con marés extraído de canteras de Ciutadella.
Esta fase también ha permitido abrir nuevos ventanales en el Salón Gótico que, por una parte, aportan iluminación natural a esta estancia y, a la vez, permiten ver el puerto desde el interior del Salón.
La segunda fase se centra en terminar de construir dos de los tres contrafuertes, habilitar el paseo y embellecer la zona. Ya se empieza a visualizar el paseo que permitirá hacer un recorrido desde la Plaza des Born, alrededor todo el Ayuntamiento, accediendo al Bastió des Governador y paseando por todo lo que era el Real Alcázar.
Con esta actuación, Ciutadella recuperará una parte muy importante de su patrimonio histórico y, a su vez, se habilita un nuevo producto turístico con gran potencial, que incluye también un nuevo mirador en el puerto.