El análisis de agua encargado por el Ajuntament d’Alaior ha vuelto a confirmar que el agua de la garganta de El Prat de Son Bou que se encuentra en la playa está en perfecto estado y no ha habido ningún vertido de aguas fecales por parte de ninguna depuradora de la zona.
Como ya se dijo hace unos días, se trata de agua estancada y algas, resultado de un proceso natural de descomposición. Cabe recordar también que la garganta es una zona donde habitan un número considerable de animales, como patos, por lo que es prácticamente imposible que el agua luzca al igual que la del mar.
La muestra ha dado como resultado que la concentración de parámetros como escheríchia coli, enterococos intestinales o amonio, típicos de agua no depurada, no es significativa, por lo que se descarta totalmente que una depuradora haya estado vertiendo agua no depurada a la zona.
El alcalde de Alaior, José Luis Benejam, ha lamentado que se hayan hecho estas graves insinuaciones, sin tener ninguna prueba de que lo demostrara, «se ha creado una preocupación innecesaria a los usuarios de la playa, y su buena imagen turística Son Bou se ha visto afectada durante estos días, por unas acusaciones que no tenían fundamento alguno ni se habían demostrado ni que fuera, con alguna prueba con base científica», ha dicho Benejam.