Las restricciones y los confinamientos nos dejaron pocas opciones para el suministro de productos básicos. Entonces “descubrimos” que en Menorca había muchos productores que tenían buen producto, de calidad, que podían servirlo en nuestros domicilios. Además entendimos que era un impulso claro a ayudar a la economía local, aquellos de lo que se gasta aquí, vuelve antes o después a nosotros.
Pero estamos en 2022 y afortunadamente la pandemia ya no es un freno a la economía. No obstante, muchas voces advierten de que estamos volviendo a la situación prepandémica y eso significa que no estamos dando apoyo a los productores locales que ven cómo el factor precio y la fuerza de la industria alimentaria que viene desde fuera de los límites de la isla recupera cifras de 2019.
Es cierto que se ha avanzado en el buen camino de dar apoyo a los productores, que se les ha generado un (o varios) escaparate donde dar a conocer qué hacen, que se ha constatado que hay calidad en los productos de la huerta o de la ganadería menorquinas. Entonces, ¿por qué vuelve a bajar la cifra de negocio en este campo?
Menorca no compite en cantidad. No puede. Por tanto exprime tanto como puede la calidad y el crear valor añadido a los productos. El concepto de valor añadido implica trabajar la materia prima para darle algo más.
Desde hace años se ha trabajado de manera cooperativa para suplir los campos en los que los productores no era tan diestros; la comercialización, por ejemplo. Estos avances se han dejado notar y no hay duda de que en el aumento de personas que trabajan el mundo agrario y ganadero más allá de la industria lechera y quesera se puede advertir que hay mejoras.
La diversificación amplía la carta de oferta y el marco de campañas donde se impulsa la venta de estos productos, por ejemplo a través del mundo de la restauración, son un camino ideal para que salga el producto. No obstante, la competencia es muy grande y quien toma la decisión final sigue siendo el consumidor. ¿Habrá servido de algo el impulso que se ha dado al producto local si ahora se está perdiendo de interés frente a las opciones foráneas? Hoy son una minoría los que van al mercado de abastos buscando fruta, verdura, pescado o carne de la isla. Para el consumidor, cuenta lo que se paga, más hoy en día. Y esto puede devolver al producto local de Menorca a la casilla de salida.