El ayuntamiento de Maó ha destinado un total de 50.000 euros en ayudas para que las familias con dificultades puedan afrontar el gasto energético, con entre 300 y 500 euros por hogar, ha anunciado este jueves la institución en un comunicado.
El objetivo de la convocatoria es prevenir la vulnerabilidad energética de las personas o familias que tienen problemas para mantener su vivienda en condiciones adecuadas de habitabilidad, y complementar el esfuerzo de las familias que han necesitado destinar una mayor proporción de sus ingresos a cubrir la factura del consumo energético.
Los beneficiarios deberán estar empadronados en el término municipal, ser titulares de un contrato de suministro eléctrico o de gas (excepto si están en alquiler y el contrato no figurase a su nombre), y no deberán figurar como perceptor de ninguna ayuda de emergencia de suministros de los servicios sociales municipales durante 2022. Finalmente, deberán estar al corriente de sus obligaciones tributarias.
El consistorio ha remarcado que se tendrá en cuenta la renta limpia al año de la unidad familiar, así como las retribuciones y las ganancias patrimoniales. Los beneficiarios recibirán un programador que les permitirá controlar el consumo energético de sus viviendas e información para contribuir al ahorro energético.
