El Ayuntamiento de Maó ha contado este año con la colaboración de los usuarios del centro polivalente Carlos Mir para elaborar los adornos de fiestas de la plaza Bastió.

Se trata de una prueba piloto que pretende sustituir las habituales banderitas de plástico por otros adornos realizados con materiales más sostenibles.

En este caso, se han elaborado 600 metros de banderitas -1.360 unidades- de un total de 24 kilómetros que se instalan en toda la ciudad.

Los ornamentos están hechos con telas recicladas, cedidas por comercios de Maó, que han sido sometidas por un proceso laborioso de recortar, rotular, coser y enhebrar durante los talleres creativos del centro Carlos Mir, que ha permitido a sus usuarios trabajar competencias y habilidades motrices atencionales y cognitivas. Concretamente, han trabajado en este proyecto una treintena de personas.

Durante esta mañana la Brigada Municipal ha enramado la plaza y ha colocado un cartel informativo sobre esta iniciativa.