La cuarta edición del programa veraniego ‘Un estiu per crèixer’, para los jóvenes de entre 14 y 17 años de Ciutadella, finaliza dejando buenas experiencias entre los jóvenes y las empresas participantes.
Un año más, jóvenes con ganas de pasar parte de su tiempo libre del verano a aprender de una manera activa y no formal, han podido crecer y aprender en un ámbito de su interés. El programa está inspirado en la metodología de aprendizaje-servicio, que fomenta la oportunidad de aprender observando y realizando acciones, a la vez que los jóvenes realizan un servicio allá donde pasan sus quince horas semanales durante un mes.
En esta presente edición, además, el programa ha fomentado la iniciativa y aportaciones que puedan realizar los jóvenes en sus centros de aprendizaje, los llamados ‘proyectos de mejora’, que ayudan a que los jóvenes participen de manera más activa a mejorar el entorno más cercano en el que se encuentran. Estos proyectos pueden ser el de preparar y llevar a cabo un juego o taller en la escuela de verano o crear y publicar contenidos en las redes sociales para dar visibilidad en el centro donde están o en los productos locales de la isla.
A diferencia de anteriores ediciones se han ampliado las plazas disponibles hasta un total de noventa y dos (51 en julio y 34 en agosto) de forma que todos los jóvenes inscritos han tenido su plaza este verano.
En esta cuarta edición del programa participaron un total de cuarenta y cinco empresas y entidades colaboradoras más seis departamentos del Ayuntamiento de Ciutadella.
