No era un partido fácil, por el rival y por las circunstancias con las que el Hestia Menorca tuvo que afrontarlo, el rival, uno de los equipos más en forma del momento, el FIBWI Palma, las circunstancias, Jackson aún sin poder jugar y Kravtsov de baja. Con todo este cóctel, el equipo supo estar fuerte mentalmente y fue el primero en encontrar el acierto del que careció el partido en muchos minutos, a ello le sumamos una defensa espectacular en el tercer y cuarto período, con todo ello, el equipo de Zamora supo llevarse un triunfo de mucho mérito, 71-48, gestado en una segunda mitad coral, que acaba con la racha de derrotas y deja a los menorquines en lo alto de la clasificación tras el primer derbi oficial ante el Palma. Tomaic, 14 puntos y aclamado por su gran partido, haciendo olvidar al ucraniano, Yomi, MVP del partido, 7 puntos y estratosférico en el rebote, hasta 15 capturas, Sanz, gran partido el suyo, especialmente en la segunda mitad, y el Alderete, lideraron un triunfo coral y en el que todo el equipo supo aportar su granito de arena. El Hestia Menorca fue el primero en tomar el control del marcador, dos triples de Tomaic y Varela le daban las primeras rentas, que se movían en el entorno de los 4 puntos, 11-7 a 4 minutos de finalizar el primer cuarto. El buen trabajo en campo propio dio los primeros frutos en el marcador, un triple de Luís García y dos puntos más de Tomaic obligaban a parar el encuentro a Pau Tomás para parar el intento de despegue menorquín, 18-9, un tiempo muerto que surtiría efecto, el triple de Castillo abría un parcial final de 1-7 que dejaba el marcador en un 19-16. El juego ofensivo desapareció en el segundo acto o, mejor dicho, en los primeros 8 minutos, las defensas eran claramente superiores y los puntos se vendían caros, 2-4 en cinco minutos jugados y solo en los dos minutos finales aumentaron las prestaciones ofensivas. Antúnez pareció dar luz desde el 6.75, un triple que abrió la lata y pese a que Longarela y Suárez también acertaban desde la larga distancia, el Palma salía beneficiado, llegando al descanso con dos puntos de ventaja, 32-34. Poco cambiaba el partido en el inicio del tercer parcial, al Hestia Menorca le faltaba acierto exterior y no encontraba opciones en pintura, con este guion los de Pau Tomás seguían mandando aunque con ventajas cortas, 36-38 con cuatro minutos jugados. Los de Zamora se escudaron en su defensa, desde esa faceta el equipo creció, anuló por completo el juego mallorquín y salió de las arenas movedizas en las que se encontraba metido, del resto se encargarían dos transiciones de Alderete y Sanz y dos triples de Tomaic y Longarlela, parcial de 15-0 y 49-38 al entrar en el cuarto final. El Palma estaba fuera del partido, no tanto por el resultado, si no por empotrarse una y otra vez contra una grandísima defensa, en ataque Sanz había tomado el mando de operaciones, tanto dirigiendo como anotando y la renta se estiraba hasta los 14 puntos, 53-39. El partido estaba encarrilado pero no sentenciado, el Hestia Menorca no debía bajar el pistón, ese que había elevado y dejado al Palma en 4 puntos en 13 minutos de juego, y no lo bajó, supo jugar con cabeza y se llevó una victoria plácida y de mucho mérito. |