El Avarca de Menorca regresa de Sant Cugat con los tres puntos tras imponerse por 1-3 en la pista catalana. Las isleñas cedieron el primer set 27-25, ganaron con suficiencia los dos siguientes 21-25 y 20-25 y lograron el triunfo final en el cuarto parcial con un 32-34. Este resultado más el triunfo de Gran Canaria sobre Tenerife deja a las de Bep Llorens segundas en la clasificación.
Pero la victoria no esconde que las menorquinistas volvieron a tener problemas a la hora de cerrar algunas mangas en las que dominaban con claridad de una forma similar a lo que les ocurría al inicio de la temporada. Nada a reprochar al juego desplegado, pero al Avarca le falta, en ocasiones, el ‘instinto asesino’ para matar un partido.
Un buen ejemplo fue el primer set. El Avarca lo dominó con claridad. Un 6-12 obligaba a las locales a pedir tiempo muerto. Con 13-19 el técnico local volvió a pedir un respiro para frenar la avalancha de juegos y puntos del Avarca. Con 19-22 todo parecía sentenciado, pero el Sant Cugat reaccionó y el Avarca se quedó sin ideas. Con 22-24 el Avarca dispuso de dos bolas de set que desaprovechó. Aún desperdició una tercera con 24-25. El Sant Cugat tuvo su oportunidad con el 26-25 y no la desaprovechó.
El equipo menorquín notó el golpe y en el inicio del segundo set el Sant Cugat dominó. La primera ventaja para las isleñas llegó con el 8-9 pero fue un espejismo. Poco después el luminoso señalaba 16-12 lo que obligaba a Llorens a detener el juego. El Avarca reaccionó por fin y empezó a imponer su juego hasta llegar a una fase de máxima igualdad. Los empates se sucedieron a 17,18, 19, 20 y 21. El Menorca dijo basta y anotó cuatro puntos seguidos para llevarse el set.
Las locales sabían que el teimpo iba en su contra ya que no podrían imponerse en un partido largo contra el Avarca. Por ello pusieron toda la carne en el asador en el tercer set para lograr una ventaja importante (10-5). Pero las menorquinas supieron remontar para equilibrar a 15 puntos. Al final el set cayó del lado isleño 20-25.
El último parcial fue agónico. Al igual que en el primero, el Avarca llegó al momento decisivo con una ventaja sustancial (20-23) pero el Sant Cugat quería forzar el tie-break y empató el choque a 23. Las isleñas dispusieron de dos bolas de partido (23-24 y 24-25) pero no supieron rematar a sus rivales que tuvieron después dos pelotas de set (26-25 y 27-26). En esta fase de gran igualdad las isleñas desperdiciaron tres bolas de partido más mientras que el Sant Cugat tampocó logró finiquitar el set pese a tener dos oportunidades para ello. En un final de infarto el Avarca se llevó el gato al agua por 32-34.
