Madrid/Palma, 13 feb (EFE).- Los accidentes laborales causaron 826 muertes el año pasado, 121 más o un alza del 17,2 % respecto a 2021, de los cuales 10 se registraron en Baleares, según los datos actualizados por el Ministerio de Trabajo.
De los 10 contabilizados en Baleares, siete se produjeron durante la jornada laboral de asalariados y uno en desplazamiento al trabajo, y dos trabajadores por cuenta ajena murieron en accidente laboral, uno de ellos “in itinere”.
De ellos, 679 fueron en la jornada de trabajo, 104 más o un incremento del 18,1 %; mientras que 147 fueron en desplazamientos al trabajo, los denominados “in itinere”, 17 más que en el año anterior o un repunte del 13,1 %.
Del total, 747 accidentes de trabajo mortales fueron entre asalariados, un 18 % más que en 2021; y 79 entre autónomos, con un alza del 9,7 %.
Por causas, y dentro de los accidentes en jornada, infartos, derrames y otras causas naturales fueron la primera, con 285 fallecidos, 64 más que en el año anterior o un incremento del 29 %.
Por sectores, los servicios acapararon el mayor número de accidentes mortales en jornada de trabajo, con 320; aunque el mayor incremento fue para la agricultura, con 95 fallecidos, 43 más que en 2021, un aumento del 82,7 %.
Asimismo, destaca también el alza de los siniestros mortales en la construcción (27,1 %), que eleva el número de trabajadores que perdieron la vida en este sector hasta los 150.
En un comunicado divulgado este lunes, CCOO lamenta que la siniestralidad laboral es “el peor indicador socioeconómico en España”; y su secretario de Salud laboral, Mariano Sanz, critica que “acabar con esta situación no es una prioridad de la mayoría de las empresas ni de las Administraciones públicas”.
Los sindicatos vienen denunciando desde hace meses el incremento de la siniestralidad laboral, especialmente de los accidentes mortales, y reclamando planes de choque ante esta situación.
En total, a lo largo de 2022 se registraron 631.724 accidentes laborales con baja, un alza del 10,4 % frente a 2021.
De ellos, 552.173 fueron en jornada de trabajo y 79.551 “in itinere”.
Por otro lado, se registraron 564.701 accidentes sin baja, un descenso del 0,1 %.