Con la última desgracia- posiblemente vinculado al acoso escolar, según las últimas investigaciones y testimonios conocidos- conmocionando a la sociedad, el de Sallent, el Gobierno trabaja para que los futuros maestros de Primaria se formarán en inclusión educativa y atención a la diversidad con un «enfoque de igualdad de género a través de la coeducación, fomentando la igualdad efectiva de mujeres y hombres, la prevención de la violencia de género y el respeto a la diversidad afectivo-sexual».
Según figura en el proyecto de orden del Ministerio de Universidades al que ha tenido acceso EFE, será a partir del curso 2025-26 cuando la estructura básica de cualquier título universitario oficial que habilite para la enseñanza en esos tramos de edad deberá incluir competencias nuevas como estas en forma de módulos de seis créditos.
Así, habrá uno destinado a adquirir «habilidades personales e interpersonales» en el seno de la comunidad educativa con el objetivo, por ejemplo, de «fomentar la convivencia en el aula y fuera de ella, implementando estrategias de gestión y resolución de conflictos para abordar problemas de disciplina y contribuir a su resolución eficaz».
Otro de ellos promoverá «el respeto por la diversidad en todas sus formas (personal, familiar, social, cultural, ecológica…)», el diseño y regulación de espacios de aprendizaje en este tipo de contexto y la identificación de obstáculos para el aprendizaje a fin de ofrecer una respuesta adecuada.
Bajo el epígrafe “Género y educación”, uno de los módulos ayudará asimismo a «identificar los elementos sociales constructores de los géneros» para favorecer su reconocimiento y respeto en las aulas
… resulta un poco ridículo, cómo se propugna que el profesorado tenga que propugnar valores tales como la igualdad, la libertad sexual y afectiva, la no discriminación de féminas ni otros colectivos y demás, pero al mismo tiempo se permita que una infausta secta religiosa siga impartiendo en instalaciones educativas su dogmas, que propugnan precisamente la coacción a estas libertades, la discriminación a colectivos y demás asquerosa morralla… no se entiende, a menos que sea lo que sospechamos, que el gobierno es rehén de esa pequeña dictadura talibán teocrática extranjera… es penoso