La recientemente ampliada planta de tratamiento mecánico-biológico para la gestión y la valorización de residuos de Milà ya cuenta con una instalación de autoconsumo fotovoltaico que tiene una potencia superior a los trescientos kilovatios.
Dicha instalación fotovoltaica está colocada sobre la cubierta de la planta de tratamiento, ocupando una superficie total aproximada de 1.411 metros cuadrados en la que se sitúan 558 módulos con una potencia total de 301,32 kWp.
Además, las placas solares estarán acompañadas de un contador para controlar todos los flujos de energía de la instalación. De esta forma, la energía está monitorizada 24 horas al día, pudiendo conocer, en todo momento, cuánta energía se está generando, consumiendo o tomando de la red. Está previsto que la instalación cubra más del 40% del consumo anual que tiene la planta, mientras que el aprovechamiento ascenderá hasta el 80,19% de la energía generada.