Maó, 14 jul (EFE).- Los arqueólogos Carlos de Salort y Borja Corral han presentado este viernes los resultados de la última campaña de excavación en el yacimiento talayótico de Torre d’en Galmés (Alaior), uno de los más importantes de la Menorca talayótica, entre los que destaca el hallazgo de restos humanas en una de las casas prehistóricas.
De Salort ha explicado que los restos se han encontrado una de las viviendas del final de la prehistoria que se está excavando desde 2020, y pertenecen a individuos de diferentes edades y sexo, fallecidos en unas circunstancias anómalas durante el siglo III a. C.
Los esqueletos han sido exhumados por la arqueóloga Elena Sintes, especialista en la materia, y ahora están en proceso de estudio para determinar quiénes eran estas personas y qué motivó su muerte.
En este sentido, de Salort ha remarcado que “es evidente que encontrar esqueletos humanos en un espacio doméstico no es habitual”.
El estudio de los restos por parte del especialista del equipo y el análisis de una batería de muestras de carbono 14 de cada uno de los esqueletos, permitirá determinar cómo y cuándo murieron estas personas. De momento, a la espera de nuevos resultados, dos dataciones de uno de los esqueletos indican que murió entre el 370 y 201 a. C.
Los arqueólogos aseguran que con la muerte de estas personas la vivienda quedó abandonada hasta la actualidad, con la excepción de algunas frecuentaciones puntuales.
En referencia a las posibles hipótesis sobre las circunstancias de la muerte, han explicado que todavía es prematuro sacar conclusiones, aunque han situado el hallazgo en el marco de las Guerras Púnicas, en las cuales la isla de Menorca se vio implicada.
Durante la campaña también se ha encontrado un conjunto muy interesante de vajilla indígena y púnica ebusitana. “Recordemos que durante los siglos IV y III a.C. la cotidianidad de la vida de los menorquines estaba marcada por los intercambios con los cartagineses, especialmente de Ebusus, la actual Ibiza”, han señalado.
También han destacado el hallazgo de distintos silos o depósitos excavados en la roca, que están en proceso de excavación y que podrían aportar mucha información de las fases de uso más pretéritas del espacio.
La campaña arqueológica la ha llevado a cabo la asociación Amics del Museu de Menorca, con la financiación del Consell Insular de Menorca, el Ayuntamiento de Alaior y los socios de la asociación. También cuenta con el apoyo científico de Boston University, Royal Institute for Cultural Heritage de Bélgica y la Escuela Superior de Conservación y Restauración de Bienes Culturales de Cataluña, entre otros.
Precisamente, bajo el lema “Una odisea ciclópea insular”, la cultura talayótica de Menorca aspira a convertirse en 2023 en patrimonio mundial de la UNESCO.