El Pati de sa Lluna del Convent de Sant Diego de Alaior acogió ayer el recital de poesía “Llágrimes de Sant Llorenç“. Toni Farron era quien recitaba los poemas, Pere y Joan Arguimbau realizaron el acompañamiento con la guitarra, Belén Cervantes se centró en el baile y Tóbal Esteban se encargó de la imagen y proyección.
Torri Farrón hizo del recital una velada especial, donde sus versos brotaban de sus sensaciones y sentimientos propios, dándole a su poesía un estilo abstracto y muy rico. Además, preparó un poema dedicado al pueblo de Alaior.
En cuanto a la atmósfera del espectáculo, el acompañamiento musical fue uno de los pilares del recital, juntamente con los pasos de baile de Carmen Cervantes, creando una coreografía improvisada. El juego de luces fue otro de los factores destacados, ya que dotó al escenario de la espiritualidad que la poesía de Farrón transmitía.