Fue la primera y ayudó a que otras muchas la siguieran. Pilar Pons estará presente con evidente emoción por recibir de parte de Soca de mots un homenaje tan merecido.
Hoy podemos decir que la glosa menorquina tiene su propia figura de protección. En la sesión de carácter ordinario del Pleno del Consell Insular de Menorca de 23 de enero de 2022 se aprobó con carácter definitivo, y por unanimidad de todos los grupos políticos, la declaración de la glosa menorquina como bien de interés cultural de Menorca (BICIM). Pero no hay que olvidar todo lo que ocurrió antes. Hubo una serie de precursores de esta recuperación.
Quizás mejor podríamos decir, que fueron personas que hicieron lo posible para salvar del olvido una forma de expresión cultural propia y diferenciada. Los glosadores o recitadores existen de diferente forma y modo en otros lugares (otras islas pero también más allá). La glosa menorquina tiene reconocida ciertas particularidades que la hacían merecedora de salvarse del abandono y, entre aquellas personas que ayudaron a darle vida y a darla a conocer, nos encontramos a Pilar Pons. Decía Anabel Villalonga, presidenta del colectivo cultural Soca de Mots, que Pons fue pionera en un tiempo en el que no se conocían voces femeninas en la glosa. Eso supuso abrir un camino hacía la incorporación de más voces que hoy ya forman parte de la tradición de lanzar versos sobre todo tipo de temas. Las glosas ponen en boca de sus componentes asuntos de la actualidad pero también son un ejercicio de agilidad mental, de poesía urbana, de transmisión de cultura y mucho más.
Miquel Ángel Marqués del Centre d’estudis locals d’Alaior se ocupará de hacer la introducción de la jornada en la que se apoyarán en un audiovisual que retrata la figura y la labor de la homenajeada, que también acude al acto.
Evidentemente, habrá glosa que, sin duda, es lo que la mayoría del público que se acerque a Can Oliver espera escuchar.
