Winston Churchill dijo: “La historia será generosa conmigo, puesto que tengo la intención de escribirla”. Este político del siglo XX es reconocido por sus célebres discursos y su liderazgo durante la Segunda Guerra Mundial. El caso es que no es el único autor al que a lo largo de la historia se le puede atribuir una idea semejante, la que la historia la escriben los vencedores.
Esta reflexión surge de la idea que desde la Asociación Menorca Historia y Concordia quieren poner de manifiesto con obras como la que firma el Exvicepresidente del Govern balear, ex presidente del Parlament y también ex presidente del Consell Insular de Menorca Joan Huguet. Su libro “La memoria que incomoda”, quiere poner de manifiesto que la conciliación de la Memoria histórica de este país no puede explicar a las futuras generaciones sólo una parte de lo que tiempo atrás dividió a España. Por eso realiza un ejercicio de análisis sobre cómo se están estudiando los años más oscuros de nuestro reciente pasado, para que no se deje -intencionadamente o no- una parte de esa verdad en el olvido.
No hubo buenos y malos. O quizás habría que precisar que hubo tantos buenos y malos en un bando como en otro. Demonizar a un solo espectro ideológico no ayuda ni a la verdad ni a la conciliación que se supone que pretenden leyes de la Memoria histórica.
En el acto de la presentación del libro participarán el general retirado Luis Alejandre, el periodista Josep Pons y el propio autor. Es un acto abierto y público tras el cual se firmarán ejemplares.
Joan Huguet ya ha escrito otros libros antes como “La cruda realidad de España” de 2011, cuando ejercía de senador. Aquel libro era un análisis interesante de la realidad de España. Incluye artículos de opinión muy oportunamente seleccionados entre los escritos por Huguet y empieza con una definición del talante; el talante bueno, que es “atender a todos por igual”.
