No pudo ser, el Estudiantes mostró el porqué de su liderato, especialmente en la segunda mitad del partido, sometiendo a un Hestia Menorca que aguantó los primeros 20 minutos desde una buena defensa. Cuando ésta empezó a bajar el listón, los madrileños se escaparon y obtuvieron una cómoda victoria, 81-56.

Los locales dominaron ampliamente el rebote, 33 por 17, y fueron a la línea de tiros libres hasta en 26 ocasiones, por tan solo 11 el Hestia Menorca.

Omar Lo y Pol Molins fueron los que sostuvieron al equipo en labores ofensivas, 14 puntos el primero y 13 el segundo. Se echó de menos la aportación de Hannah, a penas 3 puntos. En el Estudiantes sobresalieron Carrera, 14 puntos y 7 rebotes, Wintering, 16 puntos, y Alonso 11 puntos.

Empezó bien el equipo menorquín, especialmente en labores defensivas, recuperando parte de su “ADN”, que le permitió competir de tú a tú al líder. En ataque Pablo Suárez abría el partido desde el triple y Hannah ponía el 3-5 en la que sería su única canasta en juego. Pero Carrera empezaba a hacer daño y daba la primera ventaja consistente a su equipo, 11-5. El juego defensivo menorquín y la aportación ofensiva de Omar Lo, 8 puntos en el primer tramo, permitían al Hestia Menorca mantenerse muy vivo pese a que empezaba ha hacerse evidente un factor diferencial, 10 tiros libres lanzados por los locales que les sostenían por delante en el marcador, 17-15.

Los primeros síntomas de cierta superioridad estudiantil llegarían en el segundo acto. Costaba dios y ayuda anotar y solo Lo parecía tener cierto atino de cara al aro. Los locales tenían seco a Hannah pero el Menorca, desde su defensa, superaba los peores momentos, 30-21, minimizaba el dominio del rebote colegial, 22-14, y consiguiendo acortar distancias tras canasta de Tamayo, 30-25. Dos tiros libres de Carrera llevarían el partido al descanso con un 32-25.

El 4-0 de salida no debió gustar a Javi Zamora que paraba el partido con apenas un minuto jugado. Algo empezaba a fallar, ciertos desajustes defensivos empezaban a hacer mella en el marcador. 5 puntos de Molins minimizaban daños, 38-30, pero ésta fue la última vez que el Hestia Menorca divisaría de relativamente cerca a su rival en el marcador. 11 puntos de Wintering en este período catapultaron a su equipo y rompieron el partido definitivamente.

Con 58-40 se inició un último cuarto que ya estuvo de más, el Hestia Menorca no logró encontrar su mejor versión en defensa y de ello se aprovechó un líder que tuvo un final de partido plácido, venciendo con una renta de 25 puntos.

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