A partir del próximo 29 de febrero, el Ajuntament de Maó iniciará el período sancionador en la zona pacificada del centro histórico, con el objetivo de limitar el acceso de vehículos y mejorar la calidad ambiental y la convivencia en el área. Esta medida afectará a la plaça de s’Esplanada y a las calles de ses Moreres, sa Lluna, y Sant Jordi, entre otras, buscando transformar estas zonas en espacios prioritarios para peatones y medios de transporte sostenibles. La iniciativa responde al compromiso del Ajuntament por reducir la contaminación y dinamizar la vida social y económica del centro, con la idea de ofrecer un ambiente más seguro y agradable para residentes y visitantes. Se ha diseñado un modelo mixto de circulación, que permite el acceso controlado a residentes y servicios esenciales mediante permisos especiales, y autorizaciones temporales de 48 horas que se pueden solicitar a través de la página web del Ajuntament. Hasta la fecha, se han emitido 3.827 permisos para acceder a la zona, garantizando la movilidad necesaria para los residentes del centro, vehículos de personas con movilidad reducida, establecimientos comerciales, servicios de emergencia y transporte público, entre otros. Para asegurar el cumplimiento de las nuevas normas, se ha instalado un sistema de cámaras que registra las matrículas de los vehículos autorizados. La Policía Local será la encargada de gestionar el sistema de sanciones, cruzando los datos de matrículas con la lista blanca de vehículos permitidos. Anticipándose al inicio del período sancionador, se ha lanzado una amplia campaña informativa que incluye acciones en la calle y la distribución de folletos en catalán y castellano, destacando la fecha de inicio de las sanciones y proporcionando información sobre cómo solicitar los permisos necesarios. Esta campaña se complementa con mensajes a través de redes sociales, WhatsApp, anuncios y comunicados de prensa, asegurando que la ciudadanía esté plenamente informada sobre la nueva regulación. |