El Partido Popular de Menorca ha enviado un comunicado a Menorca al Día, expresando su “condena más enérgica ante los lamentables hechos relacionados con el exdiputado Juan Carlos Grau”, de los cuales el partido ha tomado conocimiento a través de los medios de comunicación. En el texto, el PP Menorca aclara que el condenado hace tiempo que “no es afiliado del partido, ni ostenta ningún cargo orgánico ni institucional dentro de la formación“.
El comunicado prosigue mostrando solidaridad hacia las víctimas y expresando “nuestro rechazo absoluto a cualquier acto que atente contra la dignidad e integridad de los niños y niñas. La protección de los menores es un valor fundamental que debe prevalecer por encima de todo”.
Este pronunciamiento llega tras la condena de Juan Carlos Grau a un año de prisión por distribuir material pornográfico infantil. Tal como avanzó Menorca.info, la sentencia establece que Grau debe pagar las costas judiciales y se le prohíbe trabajar en profesiones que requieran contacto directo con menores de edad por tres años. Sin embargo, la ejecución de la condena de prisión se ha suspendido, con la condición de que no incurra en nuevos delitos durante los próximos dos años.
El fiscal había solicitado inicialmente dos años de prisión para Grau, pero la pena fue reducida a un año tras considerar la evitación del juicio y las dificultades probatorias como factores determinantes en el acuerdo. Grau, de 65 años, fue acusado de obtener, utilizar y compartir material pornográfico en el que aparecían menores de edad, de entre 10 y 13 años, en situaciones explícitas. La investigación reveló que el exdiputado formaba parte de un grupo de usuarios a través de una aplicación de mensajería, “Kik Live Messenger”, donde compartía los archivos.
La Policía Nacional descubrió el material al registrar el domicilio de Grau en Ciutadella el 24 de mayo de 2022. En su teléfono móvil, hallaron un total de 173.804 fotografías y 17.246 vídeos, entre los que se encontraba incluido material pornográfico infantil. La operación policial iniciada en Estados Unidos logró rastrear las conexiones de la aplicación utilizada hasta el domicilio del acusado, lo que culminó con su detención.