El parque de bomberos de Maó ha tenido un domingo por la mañana especialmente complejo con hasta cinco salidas que han incluido tres fuegos, una explosión de gas y un rescate en el Camí de Cavalls. Afortunadamente el único herido ha sido un excursionista que se ha fracturado una pierna.
La primera alarma saltaba a las 9,15 de la mañana cuando la policía local de Es Castell alertaba de humo en el interior de un bar de Cales Fonts. Los bomberos han acudido y extinguido un fuego que se había iniciado en un microondas y que había afectado a buena parte de la instalación eléctrica del local. No hubo heridos.
Después llegaba otra alerta. Una quema de rastrojos se había descontrolado en Trebalúger y afectaba a un árbol. El conato de fuego se pudo controlar sin problemas. Hubo otro incidente similar en Es Castell que se pudo dominar, también, en poco tiempo.
A media mañana llegaba un aviso del 112. Un excursionista de unos 30 años de edad necesitaba ser rescatado en el Camí de Cavalls en la zona de Ses Salines entre Mongofre y Addaia. A consecuencia de una caída se había fracturado la pierna y no se podía mover. Los bomberos le rescataron y lograron que fuera evacuado hasta el hospital.
El último incidente fue una explosión de gas en un trastero en la urbanización de Horizonte en Es Castell. La deflagración tiró varias paredes pero no hirió a nadie. La fuerza de la explosión afectó también a una vivienda adyacente pero sólo causó daños materiales ya que en el momento del incidente no había nadie por la zona.
