Palma, 20 may (EFE).- El exsubdirector de Compras y Logística del Ib-Salud Antoni Mascaró ha asegurado este lunes que la adquisición por parte del Govern balear en abril de 2020 de un lote de 1,5 millones de mascarillas de la empresa Soluciones de Gestión, investigada en el caso Koldo, eran para uso civil y de profesiones esenciales.
Mascaró ha comparecido en la comisión de investigación del Parlament balear sobre la compra de estas mascarillas y ha dejado claro que la intención de la compra era para “tener un stock de seguridad” para ciudadanos y profesiones esenciales.
En su declaración ha explicado que él redactó un informe de urgencia de compra del material, en mayo de 2020, y también otro interno, en marzo de 2020, para iniciar la reclamación a Soluciones de Gestión de 2,6 millones de euros por “incumplimiento” del contrato porque las mascarillas no eran de la calidad solicitada.
Mascaró ha desvelado que él dio la orden para que las mascarillas “no se destruyeran” y que “se sacaran” del circuito sanitario con el fin de almacenarlas por cuanto estaba en marcha esta reclamación.
El técnico ha insistido en que los cubrebocas comprados, de la clase KN95, eran necesarios y cumplían con todos los requisitos exigidos por las autoridades de China, que era el país que en ese momento exportaba mascarillas a todo el mundo.