Dentro y fuera, en el teatro y en la calle. Maó ha mostrado este viernes su pasión por la ópera con motivo de la celebración de la 53ª temporada, organizada por la Fundació Menorquina de l’Òpera y Amics de s’Òpera de Maó, y que ha escenificado La Bohème, la obra de Giacomo Puccini. Una ópera en cuatro actos que narra las aventuras y desventuras de cuatro jóvenes bohemios que viven juntos: el pintor Marcello, el poeta Rodolfo, el filósofo Colline y el músico Schaunard. Deberán desafiar los caprichos de su vecina Mimí y los escándalos de su amiga Musetta. La ópera de Puccini ha subido a escena en una producción del Teatro Regio de Parma, dirigida escénicamente por Massimo Gasparon y que ha contado con Francesco Lanzillota en el podio dirigiendo a la Simfònica de les Illes Balears (OSIB). Al coro ha estado la asociación de ópera menorquina. El elenco de estrellas lo han formado el tenor Iván Ayón Rivas en el papel de Rodolfo y la soprano Carolina López Moreno como Mimí. Enkeleda Kamani ha sido Musetta, el barítono Davide Luciano ha dado voz a Marcello y el barítono Carles Pachón ha encarnado a Schaunard. Desde la calle, cientos de personas han podido seguir el evento a través de una pantalla gigante instalada por el Ajuntament de Maó en el carrer de Ses Moreres. Este domingo, 9 de junio, tendrá lugar la segunda y última función de ‘La Bohème’, a partir de las 20 horas. La actuación de esta noche se graba y será emitida el sábado en una quincena de geriátricos, centros de día y clubes de jubilados de toda la isla. La iniciativa ha sido posible gracias a la segunda edición del programa ‘Ópera Gran’, con el que se pretende acercar esta manifestación cultural a las personas mayores. A lo largo de las últimas semanas, Amics de s’Òpera de Maó ha organizado también otras actividades con las escuelas de adultos y en el mismo Teatro Principal para dar a conocer detalles de la célebre obra de Puccini. |