El parque eólico de Milà, que finaliza su vida útil este mes de junio, será desmantelado este año. El departamento de Medio Ambiente, Reserva de Biosfera y Cooperación del Consell Insular de Menorca licitará próximamente esta actuación, con el objetivo de completarla antes de finalizar el 2024 y con un coste estimado de 1.000.000 euros.
“Hemos solicitado a la empresa que redacta el proyecto de futura repotenciación una separata para poder desmantelar el parque actual. Es urgente por motivos económicos y de mantenimiento, como la falta de recambios de piezas obsoletas. La viabilidad del parque era prácticamente nula. Y, sobre todo, se tiene que hacer por el peligro de tener una instalación vieja y en desuso susceptible de romperse, tal como pasó con el molino ya desmontado”, explicó este lunes Simón Gornés, conseller de Medio Ambiente, Reserva de Biosfera y Cooperación de Menorca.
Posteriormente, el Consell encargará un proyecto para la construcción de una antena de mediciones que permita conocer la intensidad del viento a diferentes alturas. Esta información será crucial para determinar la altura necesaria de los futuros molinos a instalar en Milà. El futuro parque eólico también contempla la instalación de una planta fotovoltaica en la misma área. Este proyecto incluirá propuestas de gestión, el inicio de la tramitación ambiental y la redacción de los pliegos necesarios para la futura instalación.
“Con lo que está actualmente proyectado, el nuevo parque incluye tres molinos. Pero, ¿dónde? Solo puede haber uno dentro del terreno propio. Un segundo tendría que instalarse en terrenos privados y el tercero en terrenos propiedad del Ministerio de Defensa. No nos hemos encontrado ningún acuerdo firmado ni ningún preacuerdo para llevarlo a cabo”, expuso Mateu Ainsa, director insular de Medio Ambiente.
“Ningún parque eólico se construye sin tener datos científicos fieles y verdaderos. Para obtenerlos se tiene que construir una antena de mediciones. Estas se deben realizar durante al menos un año para procesarse y determinar la altura óptima de los futuros molinos. Sin estas lecturas todo son suposiciones y nadie se interesará verdaderamente por el proyecto. Es cuestión de voluntad política y no nos hemos encontrado nada hecho”, añadió Ainsa.
El conseller de Medio Ambiente expondrá el proyecto del futuro parque en el Consell Social de la Agencia Reserva de Biosfera una vez se cuente con la información proporcionada por la antena anemométrica, proporcionando toda la información técnica necesaria para el conocimiento del Consell Social.
“Defendemos la repotenciación siempre que exista apoyo y acuerdo social y político teniendo presente que los molinos previstos son mucho más altos, de 100 metros, el doble del actual y, por lo tanto, con mayor impacto visual. Con la información de la antena anemométrica podremos decidir con total cimiento qué es lo mejor para el parque y qué altura deben tener realmente los molinos”, concluyó Gornés.